Saturday, December 22, 2007

Tanto en tan poco

Fui testigo presencial y a la vez narradora omnisciente en mi cabeza por cinco minutos, arriba de un colectivo. Ví nacer una bellísima historia de amor (eso nunca será una redundancia), de ese amor que muy pocos conocen. Él estaba sentado; ella parada. Él en el último asiento; ella cerca de la máquina. Todo indicaba que sólo el destino iba a encontrar sus miradas suspendidas en el aire y que ambos la sostendrían por tres interminables segundos. Fue tan fuerte la atracción que dejaron de mirarse de forma violenta, con gestos inoportunos y excusas tan tontas como mirar la hora y revisar una cartera buscando las pelusas del fondo. Él no notó ese nerviosismo en ella, tan inquieto como estaba. Ella quedó tan turbada que no se atrevió a volver la vista.

Fue un amor verdadedor e intenso, que sólo duró para siempre porque jamás llegó a concretarse.

Monday, December 17, 2007

No es poesía

Desde siempre estamos. No sé si imagino o si es de verdad pero no importa porque es bueno hasta lo imaginado. Es íntimo, es personal, es frágil y diminuto; casi se podría decir apichonado. Y necesita fuerza para crecer pero no crece ni un poquito. Es algo que si lo miro mucho se corta, como cuando se hace una buena mayonesa. No podría decir lo que es sabiendo todo lo que no es.
Si lo pienso un poco es algo holográfico, que brilla cuando lo veo de un lado pero del otro desaparece y parece que está pero es una (des)ilusión óptica constante.
Al tiempo todo esto muere. A veces es más tiempo, a veces menos. Y yo también muero un poquito cada vez.


Lo que parece un divague no lo es. Cada palabra vale su peso en oro y tiene un preciso significado.