Saturday, July 28, 2007

De nada un poco

La desidia, el vacío, la bola seca de pasto saltando y girando rítmicamente. ¿Es el lejano oeste? ¿Es el desierto de Atacama? Es mi blog, el abandonado, el empolvado... Cómo cuesta soltarse a escribir, pero una vez que uno desencadena el baile de los dedos todo se vuelve fácil. Recuerdo... recuerdo que odio la nostalgia. Pero casi siempre me impulsa la nostalgia a la hora de escribir. No sé por qué, porque realmente no tengo mucho para rememorar sobre todo por mi corta memoria. Y esta corta memoria cada vez me asusta más, me siento vieja, siento que no soy capaz de retener información. Igualmente creo que es más porque se me puso que tenía que ser así que por otra cosa, al fin y al cabo es mucho más fácil convencer y convencerme de una mala memoria para pensar menos, para forzar menos mis neuronas; total si alguien me pregunta algo es más facil decir que no recuerdo por mi problemita que porque no me esfuerzo en pensar.

Yo creo que es por una serie de razones externas e internas. Las externas, como siempre, se las atribuyo al vivir de cada día, a la tecnología que me facilita programar una agenda con alarmas para que no tenga que andar acordandome, o un listín con números de teléfono a los que accedo con demasiada facilidad. Qué problema, cada vez dependo menos de mi cerebro para recordar cosas.... ¿eso me dejará lugar para pensamientos superiores, más complicados? ¿o quedará tan vacía y abandonada mi cabecita como este pobrecito blog?

Yo pensé que no iba a escribir nada. Quizás no escribí nada, quien sabe.